¿Cuánto vale mi empresa? 💼💸

¡La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida! 🎵🎶🎵

¿Conoces a alguien que haya tenido diferencias con sus socios?

En ocasiones nos encontramos con que tenemos diferencias con algún socio, quieren que me vaya, o soy yo quien desea irse porque no me siento cómodo.

Y la sempiterna pregunta aparece, «Pedro, ¿cuánto vale realmente mi empresa?», generalmente se produce en estas situaciones:

• Tus socios quieren echarte y no tienes ni idea de si lo que te ofrecen es justo.
• Alguien quiere comprarte (pueden ser tus socios) y no sabes si es un buen trato o si te están subestimando.
• Un socio y tú no tenéis los mismos objetivos para la empresa y deseas que te deje trabajar y comprarle su parte.

A esta pregunta, sucede otra, cuyo respuesta siempre es la misma:

• Tú ¿Cuánto quieres?
• Pues lo que sea justo.

¿Qué es un precio justo? 🫣

¡Te doy mi opinión! (Subjetiva, por supuesto) No hay un precio exacto y universal.

Depende de varios factores, (oportunidad, barreras de entrada, generación de ingresos, reconocimiento de marca, solvencia, …)

El cariño no cuenta aquí 🥰. Son los números quienes aportan frías razones.

Si alguien quiere comprar tu empresa, olvídate de que vayan a valorar las noches en vela o las ideas geniales que tuviste en la ducha. Aquí lo que importa son los números. Al comprador le interesa ganar dinero, y no está en esto para hacer obras de caridad.

Así que, deja a un lado el factor emocional y centrémonos en lo que realmente vale tu empresa. Porque si bien el cariño no tiene precio, tu negocio sí lo tiene, y hay que averiguarlo. 😉

Hay varias fórmulas admitidas y que se utilizan habitualmente que ayudan a hacerte una idea para negociar con algo más de seguridad (y de criterio), evitando confiar en lo que te diga el comprador (o el socio que quiere apartarte/se) y ¡también! Desconfiando de lo que te dicen “tus tripas”, porque las emociones son pésimas consejeras.

¡Vamos a hacer un breve repaso por algunas de ellas!

1. El criterio de Hacienda:

Hacienda, siempre tan simpática, tiene su propia fórmula para calcular el valor mínimo de una empresa cuando vendes:

• Valor neto contable (lo que figura en el balance como Patrimonio Neto).
• Multiplica por 5 la media de los resultados de los tres últimos años.

Este número te da una idea del valor mínimo fiscal. Si vendes por menos de esto, prepárate para pagar impuestos como si hubieras vendido por ese mínimo.

2. Sentido común:

Haz un balance entre lo que tienes y lo que debes. Suena simple, pero aquí te dejo la fórmula para que no te pierdas:
Valor de los Bienes (Actualizado) – Deudas = Valor razonable.

Dentro de los bienes incluye propiedades, maquinaria, inversiones financieras, y todo lo que realmente tenga valor. Y sí, las deudas cuentan, ¡no te olvides de ellas!

El truco para valorar tu negocio: el EBITDA 🤓

EBITDA es esa palabra que asusta pero que en realidad es bastante simple. Es el dinero que genera tu negocio antes de impuestos, intereses, depreciaciones y amortizaciones. Si usas esta cifra y la multiplicas por un número (el famoso «múltiplo», que suele ser entre 3 y 8), te dará una buena aproximación del valor de tu empresa.

Ejemplo rápido: Si tu EBITDA es de 200.000 € y usas un múltiplo de 5, tu empresa podría valer 1 millón de euros. Eso sí, resta las deudas para tener el valor real.

El valor del múltiplo a utilizar varía. En función del sector, la situación económica y otros factores.

Es importante justificar el motivo de utilizar uno u otro múltiplo. Yo tengo un método de cálculo comparando el múltiplo promedio del mercado o del sector y aplicando una prima de riesgo basada en la varianza de la empresa con el mercado.

El método del descuento de los flujos de caja (DCF): El método estrella ⭐

Este método, aunque suene un poco técnico, es el más universalmente aceptado y utilizado para valorar una empresa. Lo que hace es proyectar los flujos de caja futuros que tu negocio generará y luego los ajusta a su valor presente. ¿Por qué? Porque un euro hoy no vale lo mismo que un euro dentro de cinco años, ¡y eso el comprador lo sabe! 💡

¿Cómo funciona en términos simples?

1. Proyecta los flujos de caja futuros que esperas que tu empresa genere (normalmente en un horizonte de 5 a 10 años -también es importante fundamentar y justificar el número de años que vamos a utilizar).
2. Descuenta esos flujos utilizando una tasa de descuento, que refleja el riesgo asociado al negocio. Cuanto mayor sea el riesgo, mayor será la tasa de descuento. (Otro elemento a evaluar con criterio)
3. Suma el valor de los flujos de caja descontados. Esto te dará el valor actual de tu empresa.

Ejemplo práctico del DCF: Imagina que tu empresa genera 100.000 € en flujo de caja el primer año, 120.000 € el segundo, y así sucesivamente durante cinco años. Con una tasa de descuento del 10%, cada uno de esos flujos se ajusta al valor que tendría hoy. Así, obtienes una cifra que representa lo que tu negocio vale ahora, basado en su capacidad para generar dinero en el futuro.

Conclusión rápida del DCF: Es como decirle al comprador: «Este negocio generará tanto dinero en los próximos años, y esto es lo que vale hoy en día.»

Es una de las maneras más completas de calcular el valor de una empresa, porque tiene en cuenta su capacidad de generar dinero a largo plazo.

Un experto puede decir -con razón- que he simplificado, si bien la intención de este breve artículo es explicar de modo simple en líneas generales para aquellos que desconocen por dónde empezar😉.

El valor de tu empresa no es lo que imaginas

A veces pensamos que nuestra empresa vale más de lo que es porque «hemos trabajado mucho», la hemos creado nosotros, hemos tenido muchas noches en vela, aunque el comprador no pagará por tus sueños o lo que «podría ser». Así que, si quieres vender bien, asegúrate de que tu empresa ya genera el valor que esperas, no lo que crees que generará en el futuro. El comprador no va a pagar por lo que «podría ser», sino por lo que es hoy.

¡Podemos hacer que valga más! Es cuestión de método, sistema, estructura financiera y comercial. ¿Trabajamos en ello para que aumente de valor?

Sugerencia: Siempre ten un número en la cabeza y no dependas de nadie 🧠💼

Antes de sentarte a negociar, ten claro el número que te haría sentir satisfecho. No dejes que un comprador o socio te haga una oferta que no has reflexionado. Y lo más importante: No dependas de que alguien compre tu empresa para vivir bien. Si puedes conseguir calidad de vida mientras sigues gestionando tu negocio, ¡mucho mejor! 😉

Conclusión: ¿Cuánto vale realmente tu empresa?

Valorar una empresa no es una ciencia exacta, pero con estas herramientas puedes realizar una aproximación de cuánto vale tu negocio.

Y recuerda: más vale que sepas tú mismo el valor de tu empresa antes de que te lo digan otros. Conoce tus números, haz tus cálculos y ve a negociar con confianza.

Trabajas cada día en tu empresa ¿Sabes cuánto valor has creado? ¿Consideras que podría valer más? Si necesitas valorar tu empresa y asegurarte de que tienes un negocio con valor, ¡hablamos!

Estoy aquí para ayudarte a dar los pasos correctos y establecer estrategias para maximizar el valor de tu negocio. 📩 pedro@pedrovalladolid.com

Valencia 07 de Octubre de 2024

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