Conecta emocionalmente con el cliente: El poder del cerebro límbico ❤️🧠
Segundo artículo, de la serie de 7 ❤️🧠
Las ventas no solo son números, ¡son emociones!
¿A que más de una vez has escuchado: “la venta es una cuestión emocional”?
Pues ¡es absolutamente cierto! 🤩
El cerebro de tus clientes funciona exactamente igual que el tuyo, en particular, el cerebro límbico, responsable de las emociones, los recuerdos y las decisiones basadas en sentimientos.
Activar el cerebro límbico de tu cliente convierte tu producto en experiencias y no en un objeto de consumo. Llega a su corazón y volverá una y otra vez.
A ver, a ver, a ver Pedro ¿Qué es el cerebro límbico?
Querido Padawan, el cerebro límbico es el DJ de tus emociones: controla lo que sientes, cómo recuerdas experiencias y cómo reaccionas ante situaciones que te generan placer o desagrado.
Es esa parte que hace que recuerdes con cariño una marca o producto simplemente por la experiencia que viviste, o lo mucho que te emocionó al usarlo.
En tu vida en general, y en las ventas en particular, el 95% de las decisiones que se toman están guiadas por un componente emocional (la mayor parte de las veces inconscientemente). Conectar con el límbico y lograr que asocie tu producto, tu servicio, o a ti, con emociones positivos ¡es tener la mitad del camino recorrido!
¿Y cuál es “La clave” ?: ¡No vendas productos, vende historias! 🎥
No llegarás a su corazón hablando de precios competitivos y contando las características de tu servicio, porque el cerebro límbico no responde a cifras, sino a emociones (ya llegaremos, al final de la serie, al cerebro racional, o neocórtex, al que únicamente tendremos acceso si hemos abierto antes esta puerta).
Entrena, porque aquí entra en juego el storytelling ¡el arte de contar una historia! Pero no cualquier historia, ¡una historia que conecte emocionalmente con él, en la que se vea como protagonista!
Ejemplos sencillos (juntos podemos encontrar algunos que se adecúen a tu sector): Imagina que vendes coches de alta gama. En lugar de hablar de la potencia del motor o las especificaciones técnicas (que también tienen su momento), comienza con algo más emocionante, algo que el cliente pueda sentir: “Este coche no es solo un medio de transporte, es el reflejo de que has llegado a la cima. Conducirlo es sentir el control, el lujo y la libertad que te has ganado con esfuerzo”.
Con una simple historia, el cliente empieza a asociar tu producto con su éxito personal, y el cerebro límbico empieza a disparar emociones positivas. Ya no es un coche más, es SU coche: la prueba de su éxito.
Crear experiencias inolvidables ✨
Una de las formas más eficaces de activar el cerebro límbico es ofrecer una experiencia de compra que sea memorable. No importa si vendes perfumes, electrodomésticos o servicios de consultoría, cada interacción con tu cliente puede ser una oportunidad para crear recuerdos positivos. (Y especialmente cuando nos estamos acostumbrando a pésimas experiencias de compra en muchas empresas del sector logístico, telecomunicaciones, administración pública, banca, … que generan impotencia y exasperación)
Piensa en esas marcas que te han dejado huella. No fue solo por el producto en sí, sino por cómo te hicieron sentir. La emoción de abrir un paquete bien diseñado, el trato amable y personalizado del vendedor, o el sentimiento de pertenencia a una comunidad exclusiva.
Otro ejemplo sencillo, que te sirva de “palanca” para encontrar los tuyos: Si eres un asesor empresarial, no te centres sólo en el análisis de datos o informes financieros. Haz que la experiencia de trabajar contigo sea única, con detalles que los clientes recuerden con una sonrisa. Un toque personal como un agradecimiento tras cada logro o un evento exclusivo para clientes marca una diferencia emocional profunda.
Las emociones positivas generan ventas recurrentes 🔁
El cerebro límbico además de ser el responsable de las decisiones emocionales también gestiona los recuerdos. Y si quieres que tus clientes vuelvan, necesitas asegurarte de que cada interacción con tu marca les deje una sensación positiva.
¿Sabes que los clientes que disfrutan de una experiencia emocional positiva tienen un 70% más de probabilidades de comprar nuevamente y recomendarte a otros?
Cada vez que interactúes con un cliente, piensa: “¿Qué emoción quiero que se lleve de esta experiencia?” Porque ese sentimiento será lo que recuerde la próxima vez que piense en ti.
Otro Ejemplo: Una marca de tecnología como Apple no solo vende productos innovadores, crea una experiencia emocional. Desde el diseño de sus tiendas hasta la presentación de los productos, todo está pensado para que te sientas parte de algo más grande. No compras solo un teléfono, compras estatus, creatividad y conexión. Y eso, mi querido padawan, es el cerebro límbico en acción.
Aumenta las ventas conectando con la empatía 🤝
El cerebro límbico es hipersensible a la empatía. Si demuestras a tu cliente que entiendes sus necesidades y preocupaciones, y que estás allí para ayudarle a resolverlas, crearás una poderosa y eficiente conexión emocional.
Un truco sencillo, aunque eficaz: Haz preguntas que despierten emociones. No preguntes qué necesita, sino cómo se siente con respecto a la situación actual. Si vendes software para aumentar la productividad empresarial, en lugar de preguntar “¿Qué necesitas mejorar?”, prueba con algo como: “¿Cómo te sientes al llegar al final del día con tareas sin completar?”.
Son preguntas que ayudan a reflexionar sobre sus preocupaciones y dolores de cabeza a las que puedes dar solución. No sólo resuelves un problema, sino también aliviando una emoción negativa. ¡Eso es oro para el cerebro límbico!
El poder de las historias de éxito 💪
No hay nada que toque más el cerebro límbico que una buena historia de éxito. Si tienes casos reales de clientes que han mejorado sus resultados gracias a tu producto o servicio, utilízalos a tu favor.
Seguimos con ejemplos prácticos: “Juan, director de una pequeña empresa de marketing, estaba frustrado con el crecimiento lento de su negocio. Tras trabajar con nosotros y aplicar las estrategias adecuadas, no solo triplicó sus ventas en seis meses, sino que también consiguió reducir su jornada laboral y disfrutar más tiempo con su familia.”
Historias como esta generan empatía y hacen que los clientes se vean reflejados, visualizando cómo tu solución puede cambiarles la vida.
Conclusión: Conecta emocionalmente, y los resultados llegarán ❤️💼
Recuerda: Las decisiones de compra no son frías ni racionales, son emocionales. Si logras activar el cerebro límbico de tu cliente y conectas con sus emociones, estas a un paso, no solo de cerrar una venta, sino de hacer un cliente, que te atraerá muchas más ventas. Estas creando una relación duradera, porque la emoción es lo que deja huella.
La próxima vez que hables con un cliente, pregúntate: “¿Qué emociones estoy activando?” Si puedes tocar su corazón, su cerebro límbico hará el resto.
Y si necesitas ayuda para crear un proceso de ventas emocionalmente efectivo, ¡hablemos! 📩 Con mi experiencia y tus ganas de mejorar, llevaremos tu estrategia de ventas al siguiente nivel.
Descubre cómo integrar estos enfoques en tu estrategia de ventas y dispara tus resultados. ¡Conviértete en un maestro Jedí de las neuroventas!
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Valencia 20 Octubre de 2024
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